jueves, 23 de diciembre de 2010

mi enfermedad

ya me he dado cuenta. enamorarse es una enfermedad. hace tiempo me lo dijo paco pero entonces no entendí de qué me estaba hablando. ahora por primera vez sé a lo que se refería. tu realidad se altera y empiezas a sufrir todos los síntomas típicos: la persona amada se convierte en remedio y enfermedad (grande calamaro), todas las canciones que has oído durante años vuelven como un eco para reafirmarte, se altera tu personalidad y absolutamente todo depende de esa persona, piensas que seguro que le conquistarás, que detrás de cada encuentro está la esperanza, el signo inequívoco y universal de que tu amor es correspondido. y en ese onnubilamiento, cruzas todos los límites y traicionas tus propios principios, tus propias normas vitales. te traicionas a ti misma en cuanto te descuidas. y lo peor de todo es que ni siquiera te das cuenta. yo personalmente me desperté el otro día, escuchando cosas que no quería escuchar (y que me tuvieron que repetir para que por fin comprendiera, como si una sola vez no fuera suficiente). siempre he pensado que amar a alguien no te da derecho a nada. y resulta que yo me he puesto a exigir cosas. así sin darme cuenta. y he hecho lo peor que se puede hacer: pedirle a alguien que te quiera como tú le quieres a él. este post es una obviedad adolescente pero es que a mí me ha llegado tarde. una vez identificada la enfermedad falta encontrar el tratamiento. veremos. 



http://www.youtube.com/watch?v=ZD0cO9HvrP8

4 comentarios:

...en un lugar llamado Cristina dijo...

Hay diferentes remedios. Yo he escuchado algunos y todos me han convencido y sin embargo no todos funcionaron.
Leí hasta ahogarme en letras. Fumé mi propia desesperación. Lloré mucho. Incluso recuerdo que tú me salvaste en más de una ocasión de morir aplastada en mi propia angustia.
Tú revelación no es adolescente. Es como una verdad que se olvida muy pronto. A pesar de que es el dolor físico que viene del emocional.
Sólo hubo una cosa que nunca falló. Pero no la voy a decir, porque siempre que me la dijeron odié escucharla.
Te quiero mucho Calcetina. Quiero verte muy pronto.

paulenka dijo...

hola, loquita. te echo de menos de una manera extraña, y también quiero verte muy pronto. no añadas la autoflagelación a la serie de equivocaciones que, en definitiva, significan que estás viva.
digamos, lamentá el amor no correspondido, si es el caso, pero no lamentés el haber querido todo. all is the price of all.

Acracia dijo...

Apoyo el evitar la autoflagelación que indica el comentario de arriba! Buen apunte!

Alvaro dijo...

siempre (SIEMPRE) vale la pena dar todo lo q uno tiene para dar. un abrazo grande