martes, 22 de febrero de 2011

dreams never end

Revoluciones

No me lo creo. No sé si es porque hoy me he levantado de aquella manera. O porque se me ha terminado el café sin cardamomo. O porque echo de menos. O porque en El País de hoy, como cada año, se dedicaban la portada para recordar lo heroicos que fueron cuando eran los que ya no son y todavía había sitio para héroes. Y de paso lamerle un poquito más el trasero cada día al rey de españa, don juan carlos de borbón y borbón, heredero de los mismos borbones que salieron por patas cuando aquellos franceses a los que habían dejado pasar hacia portugal, decidieron que les apetecía quedarse.
No me lo creo. No me creo nada. Veo a Gadafi hablando como los marcianos, en lenguaje de marciano, con cara de marciano de marca. Veo a Gadafi pero podría ser Berlusconi. Veo a Gadafi pero podría ser Bush. Veo a Gadafi pero podría ser Aznar. Veo a Gadafi pero podría ser Chávez. Veo a Gadafi pero podría ser cualquiera.
Me lo quiero creer. Lo juro. Tengo todas las ganas del mundo de creérmelo. Pero no me lo creo. No me lo creo. No me lo creo.


http://www.youtube.com/watch?v=zrh5kaWfyMQ&feature=related

No hay comentarios: